Podría pensarse que crear una página web no es tan complicado, especialmente con los impresionantes sistemas de gestión de contenidos que podemos encontrar por la web. Sin embargo, incluso crear una página web con wordpress, el más popular de los sistemas de gestión tiene más recovecos de lo que parece. Bajo esa fachada de sencillez, WordPress esconde unas oportunidades para conseguir tu página perfecta a los que solo un buen diseñador web es capaz de sacar partido de verdad. Y es que, aunque Internet nos ha dado a todos la oportunidad de conectarnos y de mostrar nuestro negocio al mundo entero, también es una jungla donde solo el ave con los colores más brillantes, el canto más vibrante y los bailes más espectaculares conseguirá cortejar a su pareja.
Si no te ven, no existes
Es cierto que este tipo de sistemas de gestión de contenido facilitan mucho la vida a la hora de hacer algo rápido, pero tienen el inconveniente de que, al estar realizadas con sencillas plantillas, tu web nunca destacará. Una web de baja calidad, que parece un clon de otras puede hacer que pase completamente desapercibida. Una web desordenada, hará que los clientes abandonen tu negocio. Una web con un mal SEO será enterrada bajo toneladas de información que ni siquiera tendrán nada que ver con el área de tu negocio. Es ahí donde un diseñador web puede cambiar tu negocio para mejor, abriendolo a un nuevo mundo gracias a los mejores recursos que hará que tu web sea más rápida, más estable y mejor posicionada para que sea muchísimo más facil de encontrar.
Y es que el diseño web puede parecer, a priori, algo menor, pero al final es tan importante para la publicidad de tu empresa como la calidad de tu producto o de tus servicios. No podemos cerrar los ojos a la verdad: en internet, si no te ven, no existes y lo más fácil es que no te vean. Un diseñador web puede cambiar esto de forma fácil, rápida, efectiva y sobre todo, barata, pues al final, los beneficios que puedes obtener superan con creces lo que pagas en su contratación.
El tiempo es oro.
Otra de las preguntas que mucha gente se hace, es «¿Y por qué no hacerlo yo?» Ya hemos explicado antes que son muchas las ventajas de contratar a un profesional que lleva años haciendo este tipo de tareas, pero también hay algo igual de importante o más: tu tiempo. Salvo que seas un profesional, invertirás mucho tiempo en prueba y error y, aunque te salga bien relativamente rápido, sigue siendo un proceso en el que tienes que invertir muchas horas. Quizás no tantas para un diseño básico, pero cuando hablamos de optimizar, de mejorar el SEO, de averiguar donde están las fallas de la página o los motivos por los que no recibes suficientes visitas, entonces, te darás cuenta de todo el tiempo que estás gastando en ellos. Tiempo que podrías estar invirtiendo en tu propio negocio o en tu propia vida. No es solo la profesionalidad que, queramos admitirlo o no, acaba notandose en el resultado final. Es algo tan sencillo como no desperdiciar lo más valioso que tenemos.
Es por ello que casi todas las empresas, incluso las que empiezan desde cero, acaban contactando con un profesional para hacerlo. Al fin y al cabo, no es más que una forma de poder atar bien una parte de tu negocio para poder centrarte, con la tranquilidad de que te respalda un profesional, en los entresijos de aquello que mejor se te da hacer.